Bruselas: El Caribe es la región más dependiente del turismo a nivel mundial, afirma líder de la CTO
Bruselas. Tomando en cuenta tanto la contribución a la economía como a la generación de empleo y otros parámetros, “el Caribe es actualmente la región que más depende del turismo en el mundo y su desarrollo futuro descansa en gran medida en los avances de esa industria y sus vínculos con lo económico, lo social y lo medioambiental”, afirmó Rickard Skerritt, presidente de la CTO, durante la Cumbre Anual de Turismo Caribeño, en esta ciudad.
“El Caribe tiene hoy el número 13 entre las mayores industrias de turismo del mundo en cuanto a tamaño absoluto. Es el primero internacionalmente en cuanto a contribución relativa del turismo a las economías nacionales, y décimo en cuanto a contribución al crecimiento nacional de largo plazo”, explicó Skerritt, también Ministro Turismo y Transporte Internacional de Saint Kitts y Nevis.
Y recalcó, “más aun, el turismo es el primer generador de empleo en la región luego del sector público. Es también el mayor aportador al PIB, y en 2010 alcanzó un valor de 39,4 miles de millones de dólares, partiendo de un estimado de demanda turística y de viajes de 55,4 milesw de millones, menos bienes de importación y gasto por servicios en el exterior, ascendente a 16 mil millones”, explicó el presidente de la Organización de Turismo del Caribe.
Al abrir la conferencia, Skerritt declaró que el propósito de los ministros y funcionarios caribeños y de los representantes del sector privado es iniciar “lo que esperamos sea un diálogo duradero acerca de esta vital industria y, con ello, cambiar algunas percepciones negativas sobre el turismo y sobre nuestra región que puedan existir”.
Skerritt, que recalcó que el turismo toca “cada aspecto de la vida de los caribeños” y es clave en una estrategia de desarrollo sostenible, dijo que no es igualmente proporcional el trabajo de Europa y otros socios internacionales para contribuir a desarrollar el potencial del turismo caribeño y su capacidad de generar empleo y mejoras en la vida de sus ciudadanos.
En ese sentido, dijo que es importante establecer en la cita de Bruselas las vías para un diálogo político más estrecho sobre turismo y asuntos del desarrollo afines entre el Caribe y los estados miembros de la Unión Europea, la Comisión Europea y el Parlamento Europeo. “Especialmente, queremos asegurar que el turismo esté bien presente en cualquier planeamiento estratégico que emprendan en el futuro la UE y el Caribe”.
Skerritt dijo esperar que la Cumbre abra el camino a un diálogo con entes bilaterales y multilaterales de financiamiento para el desarrollo del turismo y el apoyo a la inversión privada en el sector, y que a la vez arroje luz sobre las actuales políticas europeas sobre impuestos a la aviación, seguridad, medio ambiente, comercio de emisiones y energía limpia en el contexto de una futura política de turismo del Caribe.
El directivo regional dijo que tanto la CTO, como la Asociación de Hoteles y Turismo del Caribe (CHTA, por sus siglas en inglés), cuyo presidente, Joseph Forstmayr, también viajó a Bruselas, están al tanto de que la industria en la región requiere ganar más en competitividad, al estar en “dura competencia con destinos de mediano radio e incluso tan lejanos como China, India o Dubai, en momentos en que nuestros emisores tradicionales, Estados Unidos y Europa, también buscan activamente más clientes en los mismos mercados que el Caribe”.
Recordó que sólo dos semanas atrás una línea de cruceros líder (Royal Caribbean, con el Serenade of the Seas) anunció el reposicionamiento de una de sus naves del Caribe hacia Europa desde el verano de 2012, y subrayó que el aumento de la competencia se da en un contexto de recesión que afectó a los mercados y a los viajeros, mientras crece la tendencia de pasar las vacaciones cerca de casa y “algunos gobiernos” muestran crecientes deseos de imponer más impuestos al transporte aéreo.
Impuesto a viajes aéreos es discriminatorio
En la cumbre de turismo caribeño de Bruselas, la secretaria general interina de Caricom, Lolita Applewhaite, expresó las posiciones de la región contra el impuesto a los pasajes aéreos (APD, inglés) instaurado por el reino Unido y los calificó de “discriminatorio”.
“Apreciamos como discriminatorio el APD. Discriminatorio contra los destinos caribeños y contra las personas originarias del Caribe que viven en Reino Unido y desean viajar a sus países de origen”, afirmó.
En opinion de Applewhaite, los impuestos aéreos son impuestos al desarrollo de la región, tomando en cuenta el significado que tiene el turismo para las economías del Caribe y el hecho de que la aviación es prácticamente el único modo para los turistas de viajar entre Europa y el Caribe.
Advirtió, además, que medidas similares han sido introducidas por otros estados europeos (que buscan incrementar sus ingresos en detrimento de los destinos de viajes), y que el APD británico pudiera ser sólo la punta del iceberg que en algún momento podría llegar a todo el transporte aéreo y marítimo.
El APD británico, creado en 1994 como un “impuesto verde” y encarecido en 2010 con un cambios de bandas que golpeó particularmente al Caribe, afecta a todos los pasajeros saliendo de aeropuertos del Reino Unido. De acuerdo con autoridades de turismo de Bahamas, en 2009-2010 representó 1.900 millones de libras para el estado de la nación europea.
En noviembre pasado, la CTO, con sede en Barbados, propuso cambiar el controversial impuesto, que impone una tasa a vuelos dentro de Europa y otra a vuelos de larga distancia.
En virtud de ese aumento, si antes de noviembre un pasajero en clase económica al Caribe pagaba 50 libras (77 dólares) de APD, a partir de entonces paga 75 libras (115 dólares). Entretanto, la tasa para las clases Premium economy, business y primera clase pasó de 100 libras (154 dólares) a 150 libras (291).
De acuerdo con el nuevo sistema de bandas, un viajero de clase económica a Miami o Hawái debe pagar un APD de 60 libras, mientras que a Kingston o Nassau debe pagar 75, al igual que uno a Singapur. En el sistema anterior de bandas, los pasajeros a Bahamas, Caribe, Florida o Hawái pagaban lo mismo: 40 libras de APD.
Según datos de la CTO divulgados en noviembre de 2010 en un informe titulado “Impacto del APD y posibles alternativas para el Caribe”, de 2009 a 2010 se reportó en la región una caída promedio de 10,8% en los arribos de turistas desde Reino Unido, mientras que en septiembre de 2010 hubo un descenso de 11,6% en las búsquedas de destinos caribeños en Internet respecto a igual mes de 2009, de acuerdo con estadísticas de Cheapflights.co.uk.