Fervor histórico-religioso caracteriza a Nueva Esparta como destino turístico
Las festividades religiosas son un elemento muy arraigado en la cultura popular del estado Nueva Esparta, en la zona insular de Venezuela, lo cual va más allá de la celebración de la Virgen del Valle cada 8 de septiembre, para ofrecer a lo largo de todo el año una diversidad de actos de fe que involucran templos centenarios, verdaderos patrimonios arquitectónicos que reciben la atención de entes del Ejecutivo para preservar su incalculable valor.
Y es que aparte del sol, la playa, parques de diversión o locales de moda, la entidad oriental ofrece una interesante modalidad de turismo histórico-religioso que en los últimos años ha recibido apoyo de instituciones gubernamentales.
Un tesoro en Santa Ana
Desde la fundación de la población de Santa Ana del Norte en el siglo XVI, sus habitantes han demostrado profundo apego por la fe cristiana. Por ello, no tardaron mucho en levantar un templo que en la actualidad es uno de las joyas de la arquitectura colonial religiosa de Venezuela.
La iglesia de Santa Ana del Norte, construida en 1749, se ubica en lo que hoy es el municipio Gómez, en el noreste de la isla de Margarita. Su estructura fue totalmente recuperada con una inversión que superó los 40 millones de bolívares, mediante el apoyo de Pdvsa La Estancia, brazo cultural y social de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), y la Gobernación.
Fue un trabajo minucioso que concentró en 2014, durante varios meses, a un equipo de sociólogos, antropólogos, arquitectos y restauradores con el objetivo de rehabilitar el templo donde Simón Bolívar fue reconocido como Jefe Supremo de la República en 1816.
La Iglesia de Santa Ana fue también el lugar donde se nombró al general margariteño Santiago Mariño como el segundo en el mando de Bolívar, se ascendió a general en jefe a Juan Bautista Arismendi, prócer nacido en la región, y se firmó la derogación del Decreto de Guerra a Muerte, parte de la guerra independentista.
Hoy en día, este templo, que tiene un enorme significado espiritual e histórico para Venezuela, se ha convertido también en atractivo turístico.
Para la Virgen del Valle
Son más de 50.000 personas las que visitan cada año la explanada adyacente a la Basílica Menor de la Virgen del Valle en el municipio García, ubicado en el sureste de Margarita.
Cada 8 de septiembre, cuando se conmemora un año más de la coronación canónica de la Patrona de Oriente, el campo eucarístico se llena de música, colorido y fervor religioso en una gigantesca oleada turística, que llevó al gobernador Carlos Mata Figueroa a plantear la idea de construir un templo votivo, lo que fue ratificado por el presidente de la República, Nicolás Maduro.
Fue así como se realizó en 2014 el Concurso Público Nacional de Arquitectura Complejo Templo Votivo de la Virgen del Valle del Espíritu Santo, que buscó el mejor proyecto para ser desarrollado en un terreno de 66.753 metros cuadrados.
Tras una consulta en la que participó la ciudadanía neoespartana, que votó por su favorito entre 14 finalistas, se determinó que la propuesta estará dirigida por la arquitecta Célida Bermúdez.
Ideas innovadoras, factibles y con elementos simbólicos de espiritualidad fueron las premisas establecidas en el proyecto, que también ofrecerá confort térmico, iluminación y ventilación natural, gestión eficiente de la energía y del agua, materiales de bajo impacto ambiental y gestión de los residuos.
Unos 3,4 millones de bolívares son la inversión inicial estimada para una obra que rendirá un merecido homenaje a la fe que el pueblo de Nueva Esparta y todo el país tiene en la Patrona de Oriente, de la Armada Venezolana y de los pescadores.
Siglos de historia
Otra atracción turístico-religiosa que no dejan de admirar cientos de turistas en cualquier época del año es la Catedral Nuestra Señora de La Asunción, la segunda iglesia más antigua del país, construida alrededor de 1578. Está ubicada en el casco histórico de la capital neoespartana, en el municipio Arismendi (este de Margarita), y es ejemplo de la arquitectura eclesiástica colonial de Venezuela.
Asimismo, la iglesia San Nicolás de Bari, en Porlamar, municipio Mariño, que fue construida en 1853, es foco de constantes visitas por estar ubicada en la cultural plaza Bolívar, donde cada año se centran las actividades de la Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven). (Con información de AVN).