Adriana Hoyos, “yo nací diseñadora”
Adriana Hoyos, dice llevar en la sangre la pasión por el diseño, por las mezclas de colores y sombras, por la armonía y las luces…
Diseñadora de Iberoamérica, tiene en su compañía, Adriana Hoyos Furnishings, un concepto que se aleja del minimalismo y lo clásico.
En lugar de ello, se decanta por la combinación armoniosa y alegre de las siluetas que a su propio decir, invita a tener una conversación agradable.
Tan impresionantes llegan a ser sus diseños, que cualquier persona que haya sido testigo de sus obras, sabe reconocerlas de nuevo.
- ¿Cómo llegaste a interesarte por el diseño?
Siempre digo que yo nací diseñadora, pues este amor por el diseño y la arquitectura viene en la sangre.
Cuando me llegó el momento de los estudios fue muy fácil para mí tomar la decisión de a qué quería dedicarme.
Estudié en Estados Unidos Diseño Interior y ya llevo 27 años trabajando. He hecho proyectos de toda índole, tanto social como comercial, incluso hemos realizado diseños para aeropuertos, pues nuestra gama es muy abierta.
Decidí trabajar entre Miami, que es donde resido, y en Ecuador, y tengo un extraordinario equipo de 30 arquitectos y diseñadores.
Entre todos conformamos una empresa boutique de diseño interior y nuestra plataforma internacional, es el diseño de mobiliario.
- De las muchas obras que has diseñado, ¿cuál es la que más te ha gustado?
Actualmente, terminamos una residencia en Nassau, Bahamas y esta es la segunda vez que la hacemos y la renovamos. H
10 años la diseñamos y todavía hoy, conserva el estilo original.
Por ella, la Asociación Latinoamericana de Diseño ALADI nos otorgó un reconocimiento, pues es una casa que cumple con un propósito muy particular.
Y es que nosotros no hacemos solamente cosas bellas, sino que buscamos un propósito en los diseños.
En este caso el cliente que pidió renovar la casa, era una familia grande con una composición muy distinta y por eso la reestructuramos, adaptándonos a las necesidades de los distintos miembros.
En el diseño, respetamos el estilo original y a la vez la hicimos una casa lujosa, contemporánea y sofisticada, como el cliente quería.
- Cuando hablamos de diseño, ¿te inspiras en algún concepto?
Yo busco la inspiración del lugar donde se vaya a hacer el trabajo, porque siempre realizamos proyectos en parajes distintos del mundo.
Yo necesito conocer la identidad del territorio en el que se hace el proyecto para poder darle un toque único.
En Ecuador por ejemplo, tenemos un proyecto inspirado en la cultura y en elementos originarios de topografía y gastronomía. Incluso utilizamos en los diseños, el arte de los museos.
La inspiración para cada silueta, viene de la historia que cuentan las personas, de sus gustos, entretenimientos y anécdotas personales, porque mi equipo busca siempre la realización personal de nuestro cliente.
- ¿Qué opinas de esos espacios diáfanos, donde el cristal y el blanco son la armonía, que tanto se ven en el escenario actual del arte?
Yo no soy una persona minimalista, y creo que no podría diseñar un espacio sin armonía. Necesito mostrar a las personas algo acogedor y que genere una buena conversación.
Además, nuestras colecciones debemos adaptarlas a distintos escenarios, lugares urbanos, residencias tropicales, etc y siempre tener en cuenta que el diseño tiene una historia que contar, no puede ser estéril.
Hasta hora hemos lanzado 11 colecciones, la primera fue en 2001 y se llamaba Coco, porque uso la cáscara de coco también como toque de color y de alegría.
- ¿Utilizas materiales reciclables?
El reciclado es una buena técnica en el diseño y nosotros usamos materiales como la chonta y el coco, que son ecológicos.
Para mí, la característica sustentable es la durabilidad, pues si el mueble hay que cambiarlo a cada rato, entonces no es sustentable.
Y esa cualidad está dada por la calidad del producto, de conjunto al uso de materiales ecológicos.
- Utilizas una forma diferente a otros diseñadores, por la armonía con tu cliente y por el cambio de objetos de diseño ¿Cómo afrontas el trabajo?
Yo he hecho camino al andar, pues diseñar barcos, por ejemplo, ha sido todo un reto, aunque en la parte práctica siempre tenemos consultores que nos ayudan.
La primera experiencia que tuve vinculada al mar, fue con un barco de gala hace 20 años, una experiencia complicada por la utilidad del mobiliario, las formas de las camas, las mesitas con distintos diseños para soportar el oleaje, etc.
Pero debo decir que el diseño siempre partirá de los mismos puntos: funcionalidad y armonía.
Eso es lo que necesita un mobiliario, y lo más importante es que cumpla con su función y se adapte al estilo de la familia.