¿Es buena la asexualidad para la salud?

20 de Septiembre de 2015 8:50pm
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¿Es buena la asexualidad para la salud?

La jornada final del 7mo Congreso de Educación, Orientación y Terapia Sexual abrió sus puertas este viernes con la conferencia ¿Es buena la asexualidad para la salud?¿Y el amor?, del Dr. C. Francisco Cabello Santamaría, de España.

El especialista comenzó su intervención haciendo referencia a cómo el amor romántico y la sexualidad han ido evolucionando a la par de la corteza cerebral, y al papel que juega la neuroquímica en este sentido. Hormonas como la Oxitocina, que son liberadas por el Sistema Nervioso Central, especificó, son capaces de estimular el interés por otra persona, el deseo de encontrarla y de fusionarse, lo que se traduce en sensación de plenitud.

Por otra parte, explicó que a pesar de que varios estudios realizados han demostrado un aumento de la sexualidad a través del tiempo, tanto en hombres como en mujeres, persiste un número importante de personas asexuadas que llegan a conformar una comunidad, donde se reporta que el 73 % de sus miembros jamás han experimentado una relación sexual.

Al ahondar sobre las causas de este fenómeno, dijo, se ha encontrado una asociación tanto con trastornos psiquiátricos (depresión, esquizofrenia, autismo, etc.), como con alteraciones de la personalidad (dificultad para las relaciones interpersonales, ira, resentimiento o pensamientos suicidas), entre otras.

“A su vez, la asexualidad se asocia a estilos de vida poco saludables y puede convertirse en un factor de riesgo para el padecimiento de determinadas enfermedades crónicas como el cáncer, la demencia, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, diabetes, pérdida de la audición y de la visión”, sentenció.

Explicó además que la actividad sexual está positivamente asociada a la buena salud, al punto que se han reportado estudios que hablan de una disminución del cáncer de próstata en aquellos hombres con mayor frecuencia de eyaculación. “La repercusión en la salud mental es otro elemento a favor, ya que ayuda a disminuir el estrés y la ansiedad, mejorando la cantidad y calidad del sueño”, finalizó.

Título: “Cuestiónate a ti mismo”

Sumario:Dr.C. Juan Guillermo Figueroa, de México, disertó acerca del trabajo de investigación y el abordaje que se la desde el punto de vista académico

Partiendo de que la crítica y la criticidad más profundas radican encuestionar nuestras propias certezas, comenzó su intervención el Dr.C. Juan Guillermo Figueroa, de México, filósofo mexicano que dictó la conferencia magistralAlgunos compromisos éticos y políticos asociados al trabajo de investigación social, durante el 7mo Congreso de Educación, Orientación y Terapia Sexual, finalizado este viernes en el Palacio de las Convenciones de La Habana.

“Haré una reflexión distinta a la mayor parte de las intervenciones. Yo no soy sexólogo ni especialista sexual, soy un filósofo que trae a este evento su punto de vista acerca del trabajo de investigación y el abordaje que se la desde el punto de vista académico”, expresó Figueroa, quien propuso varias ideas fundamentales para sustentar su tesis.

En primer lugar preguntó “para qué nos preparamos en los diferentes campos académicos” y explicó que “en muchas universidades las personas obtienen un títuloacadémico y son invitados a una promesa del uso del conocimiento. Prometen usar el conocimiento para el bien de la sociedad, pero casi nunca se comprueba ni se constata. Una de las cosas que he aprendido en Cuba es que el servicio social se instauró para quetodos los graduados compartan lo aprendido y aporten a la sociedad, algo que no queda claro en otros países porque no se monitorea”.

En segunda instancia abordó qué tan crítico es realmente nuestro enfoque de investigación, incitando a reflexionar sobre la posible omisión de los compromisos investigativos.

“¿Cómo se estudia para poder afirmar que estamos investigando? La investigación es un proceso ordenado, sistemático y crítico a través del que se busca obtener conocimiento. La verdadera crítica y criticidad es cuestionar nuestras propias certezas, lo que implica matizar el propio conocimiento. Si fuera objeto yo sería objetivo, pero como soy sujeto, solo me queda ser subjetivo. Uno es crítico cuando es capaz  de tomar conciencia de su propia subjetividad.

“El conocimiento científico es elmás honesto de los conocimientos porque siempre se estácuestionando a sí mismo. La ciencia no tiene dogmas. Pero en la mayoría de los países se evalúa a los investigadores, no por la calidad de la investigación, sino por la cantidad de publicaciones”, dijo.

Después ahondó en qué tanto la comunidad académica y los académicos están cayendo en omisión. “¿Cuáles son los compromisos de las comunidades académicas? ¿Por qué se cuestiona la cantidad de investigacionespublicadas y no cómo la investigación se devuelve a la sociedad para empoderar? Socialicemos la información y conozcamos a quien la socializamos. Lo que sucede es que hay una obsesión por publicar información y no por empoderar, compartir y aportar. ¿Por qué entonces no cuestionamos los compromisos de la comunidades académicas?”, analizó.

Posteriormente provocó al auditorio al preguntar qué tan entrenado estamos para la criticidad. “Las ideas son los conocimientos que tenemos de manera racional. Cuestiónate a ti mismo, es una premisa socrática fundamental.Salte de ti mismo para ejercer la criticidad. El mayor compromiso de los investigadores es cuestionar nuestros propios prejuicios”, concluyó.

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