México se recluye y el turismo comienza a sufrir el efecto de la gripe porcina
México. Con eventos artísticos cancelados y juegos de fútbol cerrados al público, al igual que bares y restaurantes, los ciudadanos de este país se disponen a recluirse en sus casas el largo fin de semana, tras el llamado del gobierno para evitar la propagación de la epidemia de gripe porcina, que ya dejó ocho muertos y unos 260 contagios confirmados.
Visitantes extranjeros llenaban el aeropuerto capitalino para abandonar el país ante el temor por nuevas restricciones o anulaciones de vuelos, y se apreciaba la caída en el turismo. Mientras, la OMS reportaba 259 casos en el mundo y varios países cerraban enlaces aéreos hacia y desde este destino, aunque la Unión Europea rechazaba suspenderlos.
El presidente Felipe Calderón pidió a los ciudadanos quedarse en casa durante los cinco días de puente, en los que se producirá un cese temporal de la actividad económica, después de que la Organización Mundial de la Salud dijera que era inminente una pandemia de gripe porcina y elevara a 5 el nivel de alerta, cambiando la denominación de gripe porcina por "gripe A (H1N1)".
Calderón ordenó el cierre de las oficinas gubernamentales y las empresas privadas que no fueran cruciales para la economía, para intentar evitar nuevas infecciones con el virus, que se está propagando ahora por el mundo.
Por primera vez en años, tampoco habrá este viernes manifestaciones populares en el Día Internacional de los Trabajadores, una celebración que habitualmente concentra a miles de personas en el Zócalo, la plaza central de la capital de México, donde se registra el foco principal de la epidemia.
En Ciudad de México, una metrópolis de 20 millones de habitantes, todos los colegios, restaurantes, clubes nocturnos y actos públicos han sido cerrados para intentar evitar la propagación de la enfermedad, llevando la vida normal a la práctica paralización.
El virus fue confirmado en ocho casos mortales en México, donde aún faltan por examinar 84 muertes sospechosas, según las autoridades.
Efectos en el turismo
Varias agencias de noticias confirmaron que la partida de turistas ya comenzó a sentirse en los hoteles de la capital mexicana, tras el cierre de los principales lugares turísticos -museos y sitios arqueológicos- y la totalidad de los restaurantes, cafés, bares y discotecas.
México, uno de los principales destinos turísticos del mundo y que recibe de 22 a 23 millones de visitantes extranjeros por año, podría perder hasta 70.000 millones de dólares debido a la gripe porcina, calculó el secretario de Hacienda, Agustín Carstens.
Carstens estimó que la epidemia provocará una reducción de la actividad económica de entre el 0,3 y el 0,5% del Producto Interior Bruto (PIB). “El Gobierno espera que la epidemia dure menos de tres meses, tras lo cual la economía podrá recuperarse rápidamente”, agregó.
El déficit ya es evidente en el aeropuerto del DF: el tráfico habitual, de 70.000 pasajeros diarios, se hundió, con menos de la mitad de los extranjeros llegando al país, indicaron operadores del lugar. Entretanto, la tasa de ocupación en los hoteles cayó al 10%.
"Es uno de los momentos más bajos que ha vivido la ciudad, quizás el más bajo", dijo Arturo Mendicuti, presidente de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México, a AFP.
Casi 60% de las reservas de mayo fueron anuladas, añadió Juan de Dios Barba, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Ciudad de México, que agrupa a 400 hoteles capitalinos.
El número de casos sospechosos y de fallecidos por enfermedades respiratorias en Ciudad de México ha disminuido, aunque el domingo será cuando se confirmará o no una estabilización real del brote, afirmó el alcalde de la capital, Marcelo Ebrard.
Propagación y medidas preventivas
El último en unirse a la lista de países que han registrado casos de la cepa H1N1 fue Holanda, donde se reportó que un niño de tres años, que había regresado hace poco de México, contrajo el virus. Hasta ahora, se reportaron casos en Estados Unidos, Canadá, Perú, Suiza, Austria, Alemania, Gran Bretaña, Israel, Costa Rica y Nueva Zelanda.
Aparte de México, los países más afectados son Estados Unidos (con 111 contagios reportados hasta este jueves en 11 estados), Canadá, con 19, y España, donde la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, informó que “hay 13 casos confirmados y 84 en observación”.
Serbia, Sudáfrica, Brasil, Colombia, Australia, entre otros países, están verificando decenas de casos sospechosos, generalmente viajeros que regresaron de México o Estados Unidos.
Nueva Zelanda, que el martes anunció sus tres primeros casos humanos de gripe porcina, indicó el jueves que el número de casos sospechosos en el país aumentó a 111. Los casos probables aumentaron a 13 y los casos confirmados se mantuvieron en tres. Esas 16 personas habían viajado recientemente a México o a Estados Unidos, exceptuando al hijo de uno de los turistas.
Las autoridades chinas advirtieron el jueves de que existe una "altísima" probabilidad de que la gripe porcina se extienda a China, mientras millones de personas se disponían a viajar aprovechando un fin de semana largo.
Mientras, los viajeros que llegan desde México son interrogados en la frontera estadounidense y en aeropuertos mundiales, los cruceros navales evitan los puertos mexicanos, y Ecuador, Cuba y Argentina prohibieron los viajes hacia o desde México.
Estados Unidos, la Unión Europea y otras naciones desalientan los viajes no esenciales a ese país, pero los responsables del bloque de los 27 desistieron de suspender los vuelos durante una reunión de emergencia en Luxemburgo.
Las agencias de viajes de Francia, Canadá, Portugal y Gran Bretaña (donde hay ocho casos confirmados), ya suspendieron sus viajes a México. Indonesia desaconsejó a sus ciudadanos viajar a los países donde hay gripe porcina, y varias sociedades que organizan cruceros por el Caribe y que tienen su sede en Miami, Florida, renunciaron temporalmente a las escalas en México.
La OMS aún no recomienda cerrar fronteras
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció el miércoles que "el virus se extiende sin señal alguna de desaceleración" y decidió aumentar a 5 su nivel de alerta en una escala de 6.
"Todos los países deben activar inmediatamente su plan de preparación para la pandemia", advirtió su directora general, Margaret Chan. Lanzar la etapa 5 significa "una señal fuerte de que una pandemia es inminente" y que queda muy poco tiempo para prepararse, según los procedimientos de la OMS.
Además, la organización dijo que va a dejar de usar el término "gripe porcina" para evitar confusiones sobre el peligro representado por los cerdos. En lugar de ello se referirá al virus por su nombre científico: H1N1 influenza. A.
La OMS volvió a recomendar a los Estados que no impongan restricciones de viaje ni cierren las fronteras, si bien dijo que "lo prudente" es que las personas enfermas de gripe A (H1N1) retrasen sus viajes internacionales y que las que experimenten los síntomas tras haber viajado acudan a un centro médico, siguiendo las recomendaciones de las autoridades nacionales.
El virus, que afecta fundamentalmente a "jóvenes adultos que gozan de buena salud", según las autoridades mundiales sanitarias, se transmite por vía respiratoria, de persona a persona. Los síntomas (fiebre, dolor de cabeza, dolores en el cuerpo) son similares a la gripe común que todos los años mata a entre 250.000 y 500.000 personas en el planeta.
Niveles de alerta de la OMS
Nivel de alerta 1: no hay virus circulantes entre los animales que causen infecciones en los seres humanos.
Nivel de alerta 2: hay circulación entre animales domésticos o salvajes de un virus animal que ha causado infección a los seres humanos. Ya hay amenaza de pandemia.
Nivel de alerta 3: existe un virus animal un virus reagrupado humano – animal que ha causado casos esporádicos o pequeños conglomerados de casos humanos, pero sin transmisión de persona a persona.
Nivel de alerta 4: ya hay transmisión comprobada de persona a persona de un virus animal o un virus reagrupado humano – animal que es capaz de causar brotes a “nivel comunitario”.
Nivel de alerta 5: hay propagación del virus de persona a persona al menos en dos países de la región de una región de la OMS. La mayoría de los países no están afectados pero hay claros avisos de una pandemia, por lo que conviene agilizar las comunicaciones para poner en marcha medidas de mitigación planificadas.
Nivel de alerta 6: esta ya es una fase pandémica. Se caracteriza por los criterios que definen la fase 5. Acompañados de la aparición de brotes comunitarios en al menos un tercer país de una región distinta. La declaración de esta fase indica que está en marcha una pandemia mundial.