México: Temen fiasco igual al de Copenhague en etapa final de la Cumbre sobre Cambio Climático
México. Las negociaciones de la ONU y los 194 países que asisten a la Cumbre sobre Cambio Climático en Cancún entraron esta semana en su etapa definitiva, acosadas por las aprensiones de que se repita el fiasco de la conferencia de Copenhague 2009, pues se teme que sean insuperables las diferencias de opinión en asuntos como la deforestación, la transferencia de tecnología o el llamado “fondo verde” para financiar la adaptación de los países en desarrollo al calentamiento global.
Una veintena de jefes de Estado y de Gobierno, mayormente iberoamericanos, y los ministros de Medio Ambiente de las naciones participantes arribaron ayer al famoso destino turístico mexicano para presidir sus delegaciones, reunidas desde el pasado 29 de noviembre y hasta el próximo día 10, indica un reporte de EFE.
La primera sesión de la fase de alto nivel tendrá lugar hoy martes, y será encabezada por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, cuyo organismo se conformaría con alcanzar un acuerdo que permita encauzar el rumbo de cara a la próxima reunión en Sudáfrica, en 2011.
Los países desarrollados acordaron en la cumbre de Copenhague aportar 100.000 millones de dólares anuales al llamado fondo verde a partir de 2020, sin que se detallara de dónde saldrían y cómo se distribuirían.
Entretanto, la secretaría de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático (CMNUCC) aseguró que confía en alcanzar un “resultado fuerte” tras la elaboración de los primeros dos documentos de trabajo, que contienen “decisiones sobre el apoyo continuo y reforzado a los países en desarrollo en materia de adaptación y mitigación, incluyendo proyectos concretos de transferencia de tecnología”, explicó el organismo en un comunicado.
Entre esos avances se destaca la determinación de “ampliar el mandato del grupo experto para los países menos adelantados (LDC, por su sigla en inglés) y extender su mandato a un periodo quinquenal”, el más largo para un grupo de sus características hasta ahora.
Sin embargo, cualquier adelanto se ve amenazado por la creciente disputa acerca del establecimiento de un segundo periodo de compromisos del Protocolo de Kioto (PK).
El grupo del G77, que incluye a unos 130 países no alineados y a China, señaló recientemente que el segundo periodo del Protocolo de Kioto, que vence en 2012, es “una piedra angular para un resultado positivo en Cancún”, pero, en contraste, Japón se ha negado a aceptar la ampliación de ese acuerdo, que obliga exclusivamente a los países ricos a reducir sus emisiones, menos Estados Unidos, que se negó a ratificarlo en 2001.
Los negociadores del país asiático consideran injusto que algunos estados industriales acepten metas de reducciones vinculantes que afectan su competitividad, mientras que los grandes contaminadores, como EE.UU. y China, se limitan a establecer recortes voluntarios.
El riesgo de que la Cumbre sobre Cambio Climático fracase en Cancún se suma a las dramáticas predicciones de los expertos sobre el aumento de la temperatura media del planeta. La Organización Mundial de Meteorología (OMM) advirtió hace unos días que la presente década “ha marcado un nuevo récord” como la más caliente en la historia del mundo.
Su secretario general, Michel Jarraud, aseguró en una conferencia de prensa en la ciudad mexicana que 2010 “casi seguro”, a la espera de resultados definitivos de diciembre, podría haber sido el año más cálido en la historia de la humanidad.
Ante esta situación, organizaciones ecologistas como Greenpeace han criticado que los documentos que se debaten en el encuentro de Cancún edulcoren el compromiso de limitar a dos grados el aumento de la temperatura de la Tierra alcanzado en Copenhague.
Según señalaron, los textos vigentes ya no afirman que es necesario quedar “muy” por debajo de ese aumento de la temperatura del planeta, por lo que manifestaron su preocupación de que las naciones finalmente acepten quedar por debajo de un grado y medio.