Mallorca prevé una ocupación hotelera del 70 % en Semana Santa
La isla española de Mallorca afronta la Semana Santa 2025 con perspectivas muy positivas para el sector turístico, según ha valorado María José Aguiló, vicepresidenta ejecutiva de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM). Durante la segunda quincena de abril, los niveles de ocupación y apertura hotelera se prevé que superen en dos puntos los de 2024, con una media de ocupación del 70%.
Asimismo, la FEHM ha proyectado picos del 80 % en zonas como Palma, Cala Major, Sóller, Alcudia, Capdepera, Playa de Palma y Paguera, gracias a la variedad de productos turísticos como el deportivo, el cultural o el MICE. Mientras, destinos como Cala Millor, Palmanova-Magaluf, Illetas, Playa de Muro, Pollensa y Colonia de Sant Jordi esperan mantener cifras estables, en torno al 70 %.
El turismo deportivo extiende la temporada
Más allá de la Semana Santa, las previsiones han evaluado la posibilidad de que destinos como Alcudia y Cala Millor mantengan tales cifras de ocupación dada la celebración de pruebas deportivas consolidadas de alto nivel. En cambio en otras zonas, se anticipa una ligera bajada de reservas debido a la falta de vacaciones escolares en ese mes.
En materia de las condiciones que ayudan a captar una mayor cuota de mercado se valoran los establecimientos que han invertido en reformas y han reposicionado su oferta.
Mallorca, referente del turismo de lujo
La asociación Essentially Mallorca, que agrupa la oferta premium de la isla, confirma que el turista de lujo continúa mostrando gran interés por el “lujo tranquilo” que ofrece el destino. Sus principales clientes provienen de Estados Unidos, Alemania y Reino Unido, y realizan un gasto hasta diez veces superior al promedio.
Por otro lado, el perfil del viajero también ha evolucionado: crecen los turistas que viajan solos —especialmente mujeres—, que ya representan el 20 %, mientras que el 40 % viaja en pareja y el 15 % en familia.
Proyecciones para el verano 2025
Aunque todavía es pronto, las previsiones de ocupación para la temporada alta (junio-agosto) ya superan el 80 %, con una tendencia al alza gracias a las reservas de último minuto, e incluso se avizora un septiembre con buenos indicadores, confirmando la tendencia al alargamiento de la temporada turística en Mallorca.